Escrito por: Sergi Pueyo el 10 diciembre, 2020
En este artículo vamos a hablar sobre la importancia de la fisioterapia en las empresas.
La optimización del rendimiento de una empresa pasa directamente por sus trabajadores, estar motivado por una recompensa económica es mucho menos potente que un trabajador feliz y con bienestar.
La fisioterapia se relaciona muchas veces directamente con el deporte, pero nada más lejos de la realidad, la mayor parte de pacientes que nos vienen con dolores, causados por movimientos repetitivos o posturas mantenidas. Factores que suelen suceder en el trabajo.
El dolor conlleva infelicidad, pesimismo y con ello una bajada de rendimiento y un ambiente laboral no deseado. Seguramente es el daño invisible más perjudicial para una empresa, y que no solo se proyecta en una pérdida de rendimiento, sino que a la larga se traduce en bajas.
La incorporación de servicio de fisioterapia para una empresa, aporta un gran valor a la misma y a sus empleados, ofreciendo grandes beneficios.
Varios estudios concluyen que los servicios de fisioterapia, repercuten de manera directa en los empleados con los siguientes beneficios:
Reducción del estrés: El alivio de estrés después de un tratamiento es de hasta un 85%. El estrés es uno de los principales factores negativos derivados de la actividad laboral, por lo que mejorar esta área en los empleados significa incrementar su efectividad en el puesto de trabajo.
Disminución de la ansiedad y la depresión: Otro de los beneficios de la fisioterapia, es que se reduce la ansiedad en un 26% y los estados depresivos en hasta un 28%.
Alivio de la tensión muscular y el dolor: La tensión y el dolor muscular son uno de los principales problemas asociados a la vida en la oficina, puesto que la postura y la inactividad en este entorno favorecen estas dolencias. La fisioterapia es la solución directa a este daño, observándose una disminución de hasta el 48%.
-Mejora la calidad del sueño: El sueño es uno de los principales afectados de los problemas de la oficina. La postura y el estado nervioso asociado al estrés y a la ansiedad, influyen en la duración y la calidad del sueño. Con la fisioterapia, esta situación mejora hasta un 30%.
Alivio de dolores de cabeza: La incorporación de fisioterapia en la oficina ayuda a reducir de promedio un 48% los dolores de cabeza, que normalmente están relacionados con las causas anteriormente mencionadas, como el estrés, trastornos del sueño y estrés y ansiedad.
Reducción de la hipertensión: Múltiples estudios señalan una reducción promedio de un 6% en la presión arterial, un porcentaje que puede no parecer significativo pero que marca la diferencia entre una persona hipertensa y una con tensión normal. Además, la reducción de la presión arterial se mantiene durante el tiempo, incluso días después del tratamiento.
Evita las lesiones por esfuerzo repetitivo o postura fija: Todas aquellas personas que tengan una actividad repetitiva, o una postura fija en su puesto de trabajo pueden experimentar mejoras de hasta un 37%, reduciendo la incidencia de lesiones de este tipo.
Aumento de la función inmunológica: Se ha comprobado que la práctica de fisioterapia aumenta en un 35% la actividad celular y del sistema inmunológico, lo que es especialmente positivo a la hora de afrontar enfermedades autoinmunes e inflamatorias.
Mayor concentración, energía y claridad mental: los empleados muestran mayor agilidad, rapidez y precisión en su trabajo.
Incremento de la productividad: Todos estos beneficios descritos se traducen en un empleado más feliz, más sano y más motivado con su trabajo, lo que repercute directamente en su manera de trabajar y por lo tanto en su productividad.
A parte de mejorar la actividad y productividad de la compañía, la incorporación de servicios de fisioterapia en la oficina influye directamente en la salud de los trabajadores. Con la práctica de la fisioterapia se consigue disminuir las lesiones en los empleados y también contar con colaboradores más felices, lo que reduce el absentismo laboral.
Por todo lo mencionado, el servicio de fisioterapia y los masajes en la oficina resultan una herramienta de prevención laboral tremendamente eficaz.